El conjunto franjiverde lanza una oferta formal por el extremo del Castellón, que ha despertado el interés de media liga tras una temporada para enmarcar

En un mercado donde muchos miran pero pocos se atreven, el Elche ha decidido moverse. Lo ha hecho con decisión y sin rodeos, presentando una oferta formal por Álex Calatrava, el zurdo de Parets del Vallès que ha deslumbrado en LaLiga Hypermotion con el Castellón. Mientras el Espanyol sigue pensándolo y el Celta prefiere observar desde la distancia, el club ilicitano ha puesto su propuesta sobre la mesa, convencido de que es el momento de dar un paso al frente.

Calatrava, uno de esos talentos que no salen de academias de postín, ha construido su carrera desde abajo, desde campos modestos hasta llegar a Castalia, donde su fútbol ha florecido. Desborde con pausa, visión con veneno y una zurda con personalidad. Su estilo no busca agradar, busca decidir. Y lo está haciendo. En su primera temporada en el fútbol profesional no solo sumó goles y asistencias, también atrajo miradas y convenció a técnicos que saben detectar lo que va más allá de las estadísticas.

El Castellón sabe lo que tiene entre manos y no lo va a regalar. Calatrava tiene contrato largo y un precio de salida que ronda los tres millones, aunque la puerta está entreabierta. El Elche lo sabe. Y por eso ha sido el primero en llamar.

Desde el Martínez Valero se percibe una oportunidad. Eder Sarabia quiere un equipo con alma, con ritmo y con futbolistas capaces de cambiar partidos desde la banda o desde dentro. Calatrava encaja. No por lo que promete, sino por lo que ya ha demostrado. Por eso el club franjiverde ha movido ficha mientras otros siguen dudando. Porque en el fútbol, esperar es una forma muy educada de renunciar.

El Espanyol lo valora pero no concreta. El Celta no lo descarta pero sigue mirando otras opciones. El Elche, en cambio, actúa. Y a veces, en este juego de vértigo y negociación, el primero que se lanza sin miedo es el que termina celebrando.

Ahora todo está en manos del Castellón y del propio jugador. La propuesta está hecha, el interés es real y la intención es clara. Si el acuerdo llega, el Elche se llevará algo más que un buen futbolista: se llevará a futbolista con mucho futuro.