Es cierto que el Ayuntamiento de Elche lleva 18 años sin tener un Reglamento Orgánico Municipal, aunque siempre ha habido una dinámica de organización avalada por los técnicos jurídicos municipales y por las Juntas de Portavoces, donde están representados los grupos municipales. En los últimos ocho años, así ha sido, pero también se quiso poner una regulación y se empezó a elaborar un reglamento de Pleno, muy similar al que hoy dispone la Diputación, y que se quedó a muy poco para que viera la luz.

El lunes se celebró el Pleno donde el Gobierno Municipal aprobó el ROM, desestimando el 80% de las alegaciones. Por fin nace un ROM que, por desgracia y debido a unas prisas incomprensibles, no importa aprobarlo un mes más tarde después de 18 años, no tiene el consenso de todos los grupos políticos. Una reunión y media para empezar y si te he visto, no me acuerdo. Nos enteramos directamente en comisión de Pleno de lo que se estimaba y lo que no, sin posibilidad de tener un encuentro para que ese ROM que va a regular la actividad parlamentaria, organizativa y económica de la Corporación Municipal saliera, al menos, con abstenciones o votos a favor y no con votos en contra.

Llama la atención de este ROM varias cuestiones. Que un concejal con dedicación exclusiva, cobrando el 100% del sueldo por ello, pueda compatibilizar una actividad privada, que un concejal que sea portavoz adjunto en su grupo político y al mismo tiempo de la Junta de Gobierno, pueda cobrar por ambas cosas (hasta ahora nunca se ha cobrado); que el presidente/a del Pleno cobre indemnización de unos 300 euros brutos (hasta ahora siempre ha sido el alcalde o alcaldesa y sin cobrar), además de su sueldo, y con carácter retroactivo; y que haya más puntos de ensalce de la actividad política del gobierno, más autobombo.

Por no hablar de que este ROM, en su aprobación inicial, proponía nombrar personal externo para coordinar a los funcionarios cuando hay excelentes funcionarios. Más gasto. La oposición nos opusimos, pero fue el socio de gobierno de Ruz quien dijo “donde dije digo, digo Diego” y se retractó, quedando fuera esta iniciativa. Finalmente, el gobierno aprobó un ROM con más gasto del dinero público para dos concejales y que permite compatibilizar un sueldo exclusivo con uno privado. Menos mal que el señor Ruz dijo que mientras él fuera alcalde, no aumentaría los sueldos… Y sólo llevamos ocho meses.