El Elche tiene el sábado un partido clave en el que tiene la oportunidad de superar a un rival directo y poder acercarse a las dos primeras plazas, que dan lugar al ascenso directo. Además sería muy importante, aunque muy complicado por la derrota en Barcelona, ganar el golaverage particular a su favor. El Espanyol es un equipo muy peligroso, con mucho potencial ofensivo, siendo el tercer equipo más goleador de la categoría. Con Manolo González, su tercer entrenador esta temporada, ha mejorado muchísimo defensivamente: abren mucho menos los partidos, reciben muchísimos menos goles de los que recibían (son uno de los equipos más goleados), tiene un ataque muy completo (entre Puado y Braithwaite llevan 30 goles de los 59 del equipo) y además tienen dos extremos muy rápidos, el antes mencionado Puado y Jofre.
Por su parte, Braithwaite es un delantero clásico, rematador, que utiliza pocos toques para meter gol, con rupturas y mucho instinto y ahora además tienen en ataque el complemento de Gastón Vallés, que hace poco jugaba en Segunda RFEF y ahora está en el Espanyol haciendo una gran temporada siendo el perfecto complemento del danés. Este Espanyol juega en una especie de 4-4-2 con un Manolo González que esta semana no podrá contar con Nico Melamed, que aporta último pase, llegada, goles y mucho desequilibrio.
El Elche deberá tener mucho cuidado a su espalda, porque es un equipo que defiende en bloque muy alto, presionando en muchos momentos del partido hombre a hombre. Van a tener que tener vigilancias defensivas muy buenas por la velocidad de las dos bandas del Espanyol y de Braithwaite. El morbo lo pondrá Pere Milla, un jugador que dejó al Elche en el último minuto y que además está teniendo poquísima participación en el juego, mermándose desde el primer entrenador hasta ahora.
Le deseo mucha suerte al Elche, ojalá se acerque a la segunda posición.