«Invito a la gente a seguir creyendo». Así rezaba Pedro Bigas en su rueda de prensa del pasado miércoles, definiendo mejor que nadie sin quererlo la realidad que ahora mismo rodea al Elche CF. Al equipo franjiverde solo le queda hacer lo que mejor se le da: creer en lo imposible. En el peor momento, como hace tres años frente al Athletic o seis contra el Sporting B, es cuando el equipo ilicitano deberá dar la cara, apretar los dientes y disipar dudas para ganar al Mirandés y encarar los dos últimos partidos de liga con la fe de que se va a conseguir.

Una final en el peor momento

Por estado físico y sobre todo mental, al Elche le ha ‘atropellado’ la recta final en el peor momento. Tras la victoria frente al Sporting parecía que el equipo había dejado atrás el bache post-Levante, pero la realidad es que tras ganar al equipo asturiano se ha sumado un punto de 9 y se han recibido ocho goles en tres partidos. Se ha perdido solidez atrás y frente al Huesca prácticamente no se tuvo pegada arriba. Nadie sabe lo que ha pasado, pero seguramente la remontada sufrida en el Ciutat de València mermó mentalmente al cuadro ilicitano.

En lo físico también se han sobrevenido varios problemas, pues a la baja de larga duración de Borja Garcés se podría unir para este encuentro la de Manu Nieto, que se presuponía como titular esta noche tras la ausencia de Mourad por sanción pero que ha sufrido un percance en un entrenamiento. Si finalmente el gaditano no está deberá ser Óscar Plano quien ocupe esa posición pues no quedan más nombres de la demarcación en cuestión.

Otro que no estará será Clerc, que desde que cayera lesionado frente al Sporting no ha vuelto a jugar. A ellos se suman como dudas dos jugadores muy importantes para Beccacece, como son Carreira y Nico Fernández. A pesar de todo, el preparador argentino sigue creyendo en un grupo, del que afirma que, si siguen trabajando con la actitud que lo hacen, no puede pedir más.

Un rival también en urgencias

El anfitrión también se toma, como es lógico, este partido como una final. El Mirandés es, ahora mismo, el último equipo que se salvaría, marcando una distancia con el descenso de tres puntos con el Alcorcón. Si bien es cierto que suman dos derrotas seguidas, han sido capaces de sacar puntos contra equipos de la parte alta, siendo un equipo muy veloz al que cuesta hacer frente, con una hornada de jóvenes en la que destaca Carlos Martín, el delantero cedido por el Atlético de Madrid que suma 15 goles en lo que va de temporada.

Al Mirandés le conviene ganar ahora más que nunca, ya que en los dos últimos partidos de liga se enfrentará a rivales directos. Primero un Albacete que tiene la permanencia a tiro tras sumar cinco victorias consecutivas y por último un Amorebieta que en la penúltima jornada recibirá al Espanyol. Por todo ello, ganar le supondría al equipo ‘jabato’ dar un importante golpe sobre la mesa y garantizarse estar una semana más fuera de los puestos de descenso.