El alcalde agradeció la “valentía” de los promotores por emprender este proyecto, señalando la importancia de “recuperar este lugar que llega al corazón de los ilicitanos”. También destacó la labor del arquitecto Diego Castaño y del área de Urbanismo. “No ha sido fácil, pero al llegar a este gobierno nos pusimos manos a la obra para desatascar este proyecto, convocar el Patronato de Palmeral y la comisión técnica, y en pocos meses otorgamos la licencia de obras para poder arrancar ya los trabajos. Este es un gesto del nivel de intensidad que le da el gobierno municipal a las cosas. Desatascar, avanzar y promover para que el parque municipal vuelva a ser lo que siempre fue”, añadió.
Ruz subrayó que “recuperar usos aquí también es defender el palmeral” y reiteró la necesidad de reformar la Ley del Palmeral. “Blindaje, cuidado y protección de los huertos, de nuestro palmeral, pero sin obstruir el desarrollo urbanístico de la ciudad”, afirmó.
La reforma integral del restaurante incluirá la renovación del interior del espacio y la sustitución de la carpintería exterior, sin ampliar los metros cuadrados existentes ni alterar la volumetría del edificio. La planta baja contará con dos salones para eventos y un tercero para el uso diario del restaurante. La cocina se mantendrá en su ubicación original y los baños se adaptarán para cumplir con la normativa. En el sótano se ubicarán vestuarios y aseos de servicio, el almacén y una sala de espectáculos para espectadores sentados.
El acceso principal al edificio será por la fachada este, aunque habrá accesos en todas las fachadas. El restaurante ofrecerá una carta basada en la dieta mediterránea y la gastronomía ilicitana, con una inversión superior al millón de euros.
El arquitecto Diego Castaño destacó la importancia de la conservación y puesta en valor de este espacio, con “el respeto máximo al entorno y al edificio en cuestión de Patrimonio y recuperar la tradicional cúpula del comedor”. Castaño también subrayó la colaboración entre el sector público y privado para llevar a cabo este proyecto.
En diciembre, la Junta Gestora del Palmeral aprobó el estudio de integración paisajística, y en febrero, la Conselleria de Cultura emitió un informe favorable desde el punto de vista arquitectónico y arqueológico. Posteriormente, el proyecto de ejecución de obras fue aprobado por la Junta Gestora y la Junta de Gobierno otorgó la licencia de obras a finales de abril.