OPINIÓN

Ecologismo de despacho

15 de mayo de 2024 - 00:38
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El próximo domingo 9 de junio tendrán lugar las elecciones al Parlamento Europeo. Estas elecciones, que nos pueden quedar lejos, tienen una importancia extraordinaria para nuestro país, ya que del próximo Parlamento Europeo saldrán temas tan importantes como si se extiende o no el plazo para ejecutar los fondos Next Generation, en los que España tiene asignados alrededor de 160 mil millones de euros y cuyo plazo máximo de ejecución es el 31 de diciembre de 2026.

La pobre ejecución real de estos fondos nos hace preguntarnos si efectivamente podremos llegar a ejecutarlos en la fecha prevista, ya que el ritmo es realmente preocupante. En 2023, solo un tercio de los fondos previstos se ejecutaron. ¿Qué ocurrió con los dos tercios restantes? ¿Va a pedir este Gobierno que se alargue el plazo para poder llegar a ejecutar estos fondos en tiempo y forma?

Además de los fondos Next Generation, estas elecciones al Parlamento Europeo nos tocan muy de cerca a los ilicitanos. ¿Por qué? Porque la candidata del Partido Socialista, elegida por el presidente Sánchez, no es otra que la actual ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico: Teresa Ribera. La señora Ribera es la artífice de los recortes del Trasvase Tajo-Segura.

Esos recortes puramente ideológicos, ya que el impacto del aumento de los caudales ecológicos es nulo sobre el medio ambiente, nos provoca cada vez más pérdidas. Pérdidas económicas de los agricultores, tanto en la provincia de Alicante como en la huerta de Murcia, pérdidas en salud por la ansiedad que genera saber si tendrán agua disponible o no para regar sus cultivos y a qué precio y pérdidas sociales al imponer con estos recortes que se termine con esta forma de vida tan arraigada en nosotros.

Tenemos la oportunidad de decirle claramente a la señora Ribera qué pensamos de su política hídrica y medioambiental. Imagínense de qué será capaz si llega a ser Comisaria Europea, ¿cuántos desmanes más tendremos que soportar? Esta ecologista de despacho, que saca una bicicleta cuando llega a la zona de las cámaras y a la que siguen sus coches oficiales, no tiene ninguna autoridad moral para decirnos cómo tenemos que ganarnos la vida en el Camp d’Elx y, estas elecciones, son una oportunidad perfecta para manifestarnos contra ella.