El alcalde de Elche, Pablo Ruz, acompañado por la edil de Educación, María Bonmatí, el concejal de Pedanías, Pedro José Sáez, y el concejal de distrito de El Altet, Juan de Dios Navarro, ha visitado este martes el CEIP Rodolfo Tomás Samper para comprobar el avance de las obras de ampliación y la adecuación de la parcela colindante, que ya está lista para ser utilizada por el alumnado.

La adecuación del solar, de 3.790,91 metros cuadrados, ha supuesto una inversión municipal de 236.567 euros. Los trabajos, realizados durante el verano, han incluido el allanamiento y desbroce del terreno, movimiento de tierras, cimentación, la construcción de un muro de hormigón con verja perimetral y la instalación de accesos tanto peatonales como para vehículos. Solo queda pendiente la plantación de arbolado que aporte sombra al espacio.

“Estamos hablando de cosas buenas, de plazos que se cumplen en esta querida pedanía de El Altet. Esta fue la parcela que en 2024 conseguimos adherir al colegio, una petición de las familias y el profesorado. Se dijo que era imposible incorporarla y, tras negociaciones y meses de diálogo, aquí está: más de 3.000 metros cuadrados listos para su uso, con una inversión íntegra en educación pública”, ha destacado Ruz.

El nuevo patio permitirá ubicar en el espacio anterior las obras de ampliación del centro, actualmente en ejecución. La actuación, con un presupuesto de 2,8 millones de euros y un plazo de 14 meses, dotará al colegio de un nuevo aulario para Infantil, aulas multiusos, un aulario de 2 años y un gimnasio.

El alcalde ha subrayado que “gracias a la insistencia, a la lucha y a la justicia promovida por las familias y la comunidad educativa, hemos logrado que la ampliación de este colegio sea ya una realidad. Este es uno de los centros que más crece en Elche y así damos una calidad educativa justa y necesaria”.

Por su parte, la directora del CEIP Rodolfo Tomás Samper, María Dolores Cantó, ha agradecido al Ayuntamiento las actuaciones realizadas, calificándolas como “unas obras necesarias que El Altet llevaba muchos años esperando”.