El Ayuntamiento de Elche ha honrado a un destacado ciudadano con un título que trasciende lo meramente protocolar: Fernando García Fontanet, el visionario fundador del Museo Escolar de Pusol, ha sido proclamado hijo adoptivo de la ciudad en un emotivo acto celebrado en el salón de plenos del consistorio.
El reconocimiento no solo resalta la labor incansable de García Fontanet en la creación y promoción del Museo Escolar de Pusol, sino también su papel como embajador permanente de Elche y su contribución a la proyección internacional de la imagen de la ciudad. El alcalde, Pablo Ruz, ha destacado el arduo trabajo de García Fontanet para lograr que el Museo Escolar de Pusol fuera reconocido por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad, convirtiéndolo así en un activo invaluable para Elche y para el mundo.
El acto de proclamación inició con la proyección de un vídeo que recopilaba testimonios de familiares, amigos e instituciones que destacaban la trascendencia del legado de García Fontanet para la ciudad. Mariano Tarí, gran amigo del homenajeado, glosó la laudatio resaltando su compromiso con la sociedad ilicitana y su habilidad para recuperar y promover las tradiciones locales.
La distinción de hijo adoptivo de Elche fue aprobada por la Junta de Gobierno Local en base al Reglamento de Honores y Distinciones del Ayuntamiento, reconociendo así los méritos y cualidades excepcionales de García Fontanet, quien nació en Alicante pero ha dedicado su vida a enriquecer la vida cultural y social de Elche. En un gesto de profunda emoción, el alcalde entregó a García Fontanet el diploma que acredita su nombramiento, así como la insignia de la ciudad.
En su discurso de aceptación, García Fontanet expresó su gratitud hacia Elche, la ciudad que lo acogió hace más de medio siglo y que lo vio crecer junto a su familia. Recordó con cariño los lazos que lo unen a la ciudad y a su esposa Lolita, compartiendo su amor por la historia, las tradiciones y las festividades locales como el Misteri o la Semana Santa. Con humildad y orgullo, García Fontanet afirmó que llevará en su corazón el título de hijo adoptivo de Elche, donde siempre se ha sentido querido y valorado.
La trayectoria de García Fontanet es un testimonio vivo de su compromiso con Elche y su comunidad. Fundador del Museo Escolar de Pusol en 1969, dedicó su vida a preservar y promover el patrimonio cultural y educativo de la región. Su labor no ha pasado desapercibida, siendo reconocido con distinciones como la Medalla al Mérito Cultural de la Comunidad Valenciana y el Premio Iberoamericano de Educación y Museos.
Con la interpretación del himno de la ciudad, el acto de proclamación llegó a su fin, pero el legado de García Fontanet perdurará en la historia de Elche. Se une así al selecto grupo de ilicitanos distinguidos como Hijos Adoptivos, entre ellos figuras destacadas como Rafael Altamira, Óscar Esplá y Juan Francisco Martínez Modesto ‘Nino’. Antes del acto, García Fontanet tuvo el honor de firmar en el libro de honor de la ciudad en compañía de su familia, marcando así el inicio de una nueva etapa como hijo adoptivo de Elche.