El Rotary Club Elche Illice, en colaboración con el Ayuntamiento de Elche, inaugurará próximamente un monolito en homenaje al Vínculo del Doctor Nicolás Caro Martí junto al templete del Parque Municipal. La pieza, donada por el club a la ciudad, está presidida por una cerámica realizada por el artista José Cuerda y constituye un reconocimiento a una de las figuras más relevantes de la historia patrimonial y espiritual de Elche.
Con este gesto, el Rotary Club Elche Illice quiere rendir tributo a un ilicitano ejemplar del siglo XVII, cuya generosidad permitió conservar para la ciudad una parte esencial de su patrimonio natural y cultural. El homenaje forma parte del cierre de los actos conmemorativos del 25º aniversario del club, y pretende reflejar —en palabras de la entidad— “el mismo espíritu de servicio que inspiró al Doctor Caro: preservar, cuidar y compartir lo que nos fue entregado para beneficio de las generaciones venideras”.
Nicolás Caro Martí, nacido en 1579 en una familia de ascendencia noble, se casó con Isabel Malla en 1604 en la Basílica de Santa María. Tras enviudar y perder a su único hijo, tomó una decisión que marcaría el devenir de la ciudad: en su testamento estableció el “Vínculo del Doctor Caro”, por el que legaba a la Virgen de la Asunción —patrona de Elche— todas sus propiedades, entre ellas huertos, fincas y derechos de agua, si su linaje se extinguía o alguno de sus descendientes ingresaba en la vida religiosa.
Su disposición se cumplió tras la muerte en 1697 de su nieta Isabel Caro, última heredera directa, cuando el clero de Santa María tomó posesión de los bienes en nombre de la Cofradía de la Virgen. A pesar de los litigios planteados, en 1710 la Audiencia Real de Valencia ratificó el testamento y consolidó la donación.
El Vínculo del Doctor Caro adquirió con el tiempo un valor histórico, legal y simbólico que trascendió los siglos. Gracias a su naturaleza jurídica especial, los bienes legados a la Virgen evitaron la expropiación durante las desamortizaciones del siglo XIX, preservando un patrimonio agrícola y paisajístico de enorme valor. Muchos de esos terrenos forman hoy parte del Parque Municipal de Elche, inaugurado en 1946, y de los huertos históricos del Palmeral, como el Hort del Real, el Hort de Baix, el Hort del Colomer y el Hort de la Mare de Déu.
Estos espacios, integrados en el conjunto del Palmeral de Elche, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, son testimonio del vínculo entre la historia, la fe y el entorno natural de la ciudad. El legado del Doctor Caro se mantiene vivo a través de la Comisión del Vínculo, compuesta por el arcipreste de Santa María, el alcalde de Elche y un administrador designado, encargados de su custodia y gestión.
El homenaje que ahora se materializa en el Parque Municipal pretende poner en valor esa herencia y su vigencia como ejemplo de responsabilidad colectiva. “El Doctor Caro simboliza la generosidad, la visión y el amor a Elche”, destacan desde el Rotary Club Elche Illice, subrayando que su acción “trasciende el tiempo y sigue siendo inspiración para quienes creen en el servicio a la comunidad”.
La figura del Doctor Caro también está presente en la Basílica de Santa María, donde un relieve del escultor José Sánchez Lozano, realizado en 1954, recuerda su legado en el camarín de la Virgen de la Asunción. Su historia, unida a la de los huertos y al patrimonio natural del municipio, constituye uno de los capítulos más singulares del pasado ilicitano.
Con la inauguración de este monolito, Elche recuerda a un ciudadano cuya visión permitió conservar para el presente —y el futuro— una parte esencial del alma de la ciudad.









 
			



 Iván Hurtado
 Iván Hurtado
 
			 
			 
			










