MUNDIAL

Elche: una ciudad “Mágica” e histórica en los Mundiales de fútbol

La reciente designación de Elche como subsede del próximo Campeonato del Mundo ha sido recibida con sentimientos encontrados en la ciudad. Aunque muchos celebran la oportunidad de participar en un evento de tal magnitud, hay quienes consideran que esto representa un paso atrás para Elche, que ya fue sede de un Mundial en 1982
FacebookTwitterWhatsApp
Iván Hurtado
20 de julio de 2024 - 21:58

El Mundial 2030, que se celebrará en España, Portugal y Marruecos con tres partidos en Sudamérica, dará a Elche la posibilidad de acoger los entrenamientos de una de las 48 selecciones que disputarán la competición. Aunque en Elche ya éramos consciente de que no se podía optar a ser sede principal debido a caer en la preselección, no deja de hacernos ver que hemos dado un paso para atrás.

Elche, con sus modernas infraestructuras y el prestigioso Martínez Valero, debería haber podido optar a ser sede. La ciudad cuenta con todos los elementos necesarios para albergar partidos de la más alta categoría, tal como lo demostró en 1982, cuando el Martínez Valero fue testigo del histórico partido entre Hungría y El Salvador. Aquel encuentro, recordado por la actuación de Mágico González, quedó marcado en la historia del fútbol mundial al ser la mayor goleada en una competición de los mundiales, con un aplastante 10-1 a favor de Hungría.

El Martínez Valero también fue testigo de otros encuentros significativos durante el Mundial de 1982. Bélgica venció a El Salvador por 1-0 en un partido muy disputado, mientras que el enfrentamiento entre Bélgica y Hungría, que finalizó con un empate 1-1 ante 38.000 espectadores, completó la participación de Elche en el torneo.

Elche fue también el escenario del descubrimiento de un mago del fútbol, un mago llamado Mágico González. A pesar de haber encajado la mayor derrota en la historia del mundial, que todavía sigue vigente, el jugador demostró y se ganó la admiración del fútbol mundial y del fútbol español, demostrando ser un superclase a la altura de los grandes futbolistas de la época.

Ser subsede, en lugar de sede principal, se siente como un retroceso para una ciudad que ha demostrado repetidamente su capacidad para organizar eventos deportivos de gran envergadura.

A pesar de esta decisión, Elche está preparada para desempeñar un papel destacado en el próximo Campeonato del Mundo, demostrando una vez más su valía y capacidad organizativa. La ciudad espera que en futuras oportunidades, su potencial sea plenamente reconocido y se le brinde el honor de ser sede principal, como lo merece por su historia y dedicación al deporte rey.