Los trabajos han incluido la ampliación de aceras en casi un metro y la instalación de un paso de peatones elevado, con el objetivo de mejorar la accesibilidad peatonal y garantizar la seguridad de los transeúntes, especialmente para personas con movilidad reducida.
El alcalde Pablo Ruz, acompañado por el edil de Contratación, Claudio Guilabert, ha visitado la zona que este viernes se abre al tráfico. “Este gobierno municipal está sensibilizado con la accesibilidad, la reforma de la vía pública y la mejora de la eficiencia energética”, ha señalado Ruz. El alcalde destacó que con esta actuación “se ha ganado en espacio, accesibilidad, luminosidad nocturna y belleza”.
La obra se ha centrado en la ampliación de aceras en la parte este y oeste de la calle, además de la reforma en el entorno de la parada del autobús, respondiendo a las demandas de los vecinos. También se ha realizado el estrechamiento del carril a 3,5 metros, lo que seguirá permitiendo el paso de vehículos de grandes dimensiones como autobuses o camiones.
Para aumentar la seguridad de los peatones, se ha instalado un paso de peatones elevado al principio de la calle, con el fin de reducir la velocidad de los vehículos en la zona de la curva. Los trabajos han supuesto una inversión de algo más de 70,000 euros. “Apostamos por el mantenimiento de la vía pública”, ha apuntado el alcalde, quien también destacó la mejora de la iluminación en esta calle.
Además, Ruz se refirió a otras actuaciones de mejora en el centro, como los trabajos en la calle Sant Jordi, Nou Sant Antoni y en el entorno del Raval. También mencionó las labores de plantación de arbolado y cambio de luminarias en la zona de la pasarela.
Respecto a la plantación de árboles, Ruz indicó que los trabajos continúan en Carrús, concretamente en la calle Ginés García Esquitino, y que también se realizarán en Torrellano.