La catedrática de Producción Vegetal de la UMH, Francisca Hernández García, co-líder del proyecto, enfatiza la necesidad de optimizar el uso del agua en el riego, especialmente en una región mediterránea afectada por la escasez de recursos hídricos. El proyecto se centra en estudiar y optimizar las necesidades hídricas del cultivo del albaricoquero, buscando reducir la huella hídrica sin comprometer la calidad de los frutos.
Según los investigadores del Instituto de Investigación e Innovación Agroalimentaria y Agroambiental (CIAGRO-UMH), el estrés hídrico controlado en momentos específicos del ciclo de vida de la planta puede aumentar la concentración de nutrientes y compuestos beneficiosos en los frutos, mejorando así su calidad funcional y su aceptación por parte de los consumidores.
El proyecto también aborda aspectos relacionados con la salud, ya que se espera que los albaricoques cultivados bajo este sistema tengan una mayor capacidad antioxidante, lo que puede contribuir a prevenir enfermedades crónicas y prolongar la vida útil de la fruta.
Además de los beneficios para la salud y la sostenibilidad, se espera que los resultados del proyecto beneficien a productores, distribuidores y consumidores, así como contribuyan a la conservación de los recursos hídricos en la región mediterránea. El proyecto, que cuenta con la participación de investigadores del Instituto Murciano de Investigación y Desarrollo Agrario y Medioambiental (IMIDA), promete avanzar hacia un futuro donde el cultivo de albaricoques sea más eficiente y respetuoso con el medio ambiente.