Jaume García Juan recuerda con cariño su paso por el Elche CF a finales de los 90. Tras lograr un ascenso de categoría con Las Palmas y golear al propio Elche con un 0-4 en el Martínez Valero en playoffs, Jaume sorprendió al abandonar la posibilidad de jugar en Segunda para fichar por el Elche, que militaba en el «pozo» de Segunda B. La apuesta fue un triunfo: el exfutbolista logró el ansiado ascenso en su primera temporada para devolver al equipo a la categoría de plata del fútbol español seis años después.

En esta entrevista, Jaume desvela los motivos de aquel fichaje, valora el trabajo de Ciriaco Cano desde el banquillo, y los detalles de sus dos temporadas en el club franjiverde, comentando los momentos buenos como el ascenso y los negativos como el descenso en su segunda temporada. El exfutbolista sigue vinculado a Elche por amistades y negocios, sellando su cariño con una frase: «El Elche siempre tendrá un trocito en mi corazón. Soy un ilicitano más, hasta la muerte».

• Antes de fichar por el Elche, ascendió de categoría con Las Palmas enfrentándose al club en el play-off. ¿Qué recuerdos guarda de esos partidos contra el Elche?

La verdad es que en Las Palmas hicimos un playoff espectacular. En aquel entonces se jugaban seis partidos, eran grupos de cuatro y había ida y vuelta. Conseguimos todas las victorias menos un empate en el último partido contra el Elche. Ganamos casi todo y me acuerdo de que al Elche le ganamos 0-4 en el Martínez Valero, que creo que fue el partido definitivo para que luego fichara por el Elche.

• Tras esa experiencia, decidió dejar Las Palmas en Segunda División y fichar por el Elche, que militaba en Segunda B. ¿Cuál fue el motivo de esa decisión y qué le llevó a dar ese paso?

Yo quería jugar en Segunda A; allí me ofrecían tres años de contrato y me identificaba bien con el fútbol canario, un fútbol de toque que me gustaba. Pero recibí una oferta del Elche que era irrechazable: tres años de contrato y un acuerdo al que no podía decir que no. Además, la ciudad me gustaba, pensé en buscar otro reto. Venía de subir con el Espanyol de Segunda a Primera, y con Las Palmas de Segunda B a Segunda A. Estaba en racha por subir. No me lo pensé y me vine al Elche. Y de hecho ascendí. Acerté.

• ¿Cómo vivió su primer año con el Elche en Segunda B y cómo fue su adaptación al club y a la ciudad?

Fantástico. Desde el primer momento me sentí muy bien acogido, la ciudad te invita a ello: el clima, la gente. Entonces estaba Diego Quiles de presidente; hizo un equipo gastando dinero para ascender. No empezamos muy bien. Ese año tuvimos tres entrenadores: con los dos primeros estuvimos con dudas, pero al final acertamos con el tercero, que fue el que nos dio equilibrio. Ascendimos bien, jugamos el playoff con un equipazo.

• ¿Dónde vivió durante su etapa en Elche y cómo fue su adaptación a la ciudad fuera del fútbol?

Viví en el Huerto del Cura el primer año y el segundo en el centro, cerca del supermercado. Me cambié, pero viví genial. De hecho, tengo un apartamento en Santa Pola que mantengo y al que vuelvo a veranear. Pasé unos años buenísimos y tengo buenos amigos.

• ¿Qué era lo que más le gustaba de la ciudad y de la vida en Elche?

Todo. La gente era alegre, el clima invitaba a salir, a cenar, a comer. Se vivía el fútbol de verdad. No era una gran ciudad en aquel entonces, no era un pueblo, pero sí era muy cercana. Eso invitaba mucho. Hice muy buenos amigos y lo pasaba muy bien.

• ¿Cuál era su comida favorita y su restaurante o sitio para comer preferido en Elche?

En el centro de Elche estaba el Rancho Argentino, que ya no existe. Y cuando acabé mi carrera monté una cadena de restaurantes y me dedico a eso. Por el rancho de Elche tengo mi restaurante y mi negocio. Me quedé vinculado.

• ¿Hizo amigos en el club o en la ciudad? ¿Quién fue su mejor amigo en Elche y cuál conserva fuera del fútbol?

Manel, un gallego que venía del Ferrol. Hoy en día tenemos un negocio juntos y seguimos viéndonos. Su hijo está jugando en Primera con el Celta. El mío también debutó en Primera con el Alavés; ahora juega en Barcelona con el Sant Andreu, pero también estuvo en el Albacete en Segunda. Tenemos vínculo por los negocios y porque nuestros hijos también han salido futbolistas.

• ¿Qué recuerdos guarda de su día a día en la ciudad mientras jugaba en el club?

Era intenso, estábamos obligados a subir porque teníamos un equipo para hacerlo. Entrenábamos fuerte, pero luego íbamos a comer bien. Lo vivíamos bien. Cada mañana era una ilusión con el sol, luego como futbolista Íbamos a entrenar serios, como debía ser, pero el resto del día se vivía muy bien.

• ¿Qué era lo que más le gustaba de la relación con la afición y la grada del Martínez Valero?

En nuestro primer año en Segunda B y luego en Segunda A se metían 25.000, 20.000, 16.000 personas aproximadamente. Era gente conectada con el fútbol. Elche es una ciudad futbolera, aquí se vive el fútbol día a día. Tenía repercusión entonces y ahora supongo que más, estando el club en Primera.

• ¿Cuál fue su mejor recuerdo con la camiseta del Elche, ya sea un partido, un gol o un momento concreto?

El ascenso. En aquel momento estábamos casi obligados. Era muy importante para la ciudad. Llevaban años intentándolo y costaba mucho. El día del ascenso fue el más señalado, más incluso que jugar el año siguiente en Segunda. Nos hizo muchísima ilusión por lo que significaba para el club.

• ¿En qué partido se divirtió más jugando?

Ya no me acuerdo, han pasado muchos años. Pero cada vez que me vestía de corto disfrutaba. No sufría por salir a jugar. Con la tensión normal de un futbolista, pero disfrutaba. Ver el estadio con gente y el Martínez Valero como es, yo disfrutaba mucho.

• ¿Qué compañero o compañeros del vestuario le impactaron más durante su etapa en el club?

De Claudio Barragán tengo muy buenos recuerdos. Eloy, delantero centro, muy buen goleador. Había muy buenos futbolistas. Yo siempre me he llevado bien con todo el mundo.

• ¿Qué entrenador le marcó más en su paso por el club y qué enseñanzas le dejó?

En el Elche tuvimos tres entrenadores: Fabri, un técnico gallego; también tuvimos a Marcial Pina; y al final Ciriaco Cano. Él fue el equilibrio entre los dos anteriores. Nos dio estabilidad y creo que fue quien hizo que el equipo estuviera bien para afrontar el playoff. Sin desmerecer a los otros dos, pienso que Ciriaco fue el que más nos marcó.

• ¿Quién considera que fue el mejor futbolista que ha visto sobre un campo de fútbol en toda su carrera?

Maradona. Yo estaba en el Espanyol y él jugaba en el Sevilla. Y si tuviese que decir un segundo sería Paulo Futre, en su mayor momento de plenitud.

• Mirando atrás, ¿qué anécdotas recuerda de aquella temporada en Segunda B que todavía le sacan una sonrisa?

Imagínate. Después de las celebraciones… Anécdotas que ni las puedo explicar. Buenísimas, celebraciones a tope. Estábamos por las nubes. Hay muchas.

• En su primera temporada, ¿qué supuso lograr el ascenso y volver a Segunda después de tantos años en Segunda B?

Después de mucho tiempo en el pozo de Segunda B, todo el mundo se vino arriba. Hubo nuevos abonados, y en Segunda A se metía mucha más gente en el campo. Una ilusión tremenda. Ahora nadie se acuerda porque estamos en Primera, pero el pozo de Segunda B y Segunda A hay que vivirlo. Segunda B es un pozo. Lo que pasa es que, gracias a Dios, en el Elche siempre había empresarios que ponían dinero hasta conseguirlo. Pero es un pozo, y si no, que se lo digan a los empresarios que lo sostenían.

• En la segunda temporada que estuvo en el club, el equipo no pudo mantener la categoría en Segunda División, ¿qué ocurrió en aquel año?

Sin echar culpas a nadie, creo que no hicimos un equipo bien confeccionado. Mantuvimos el 80% de la plantilla que venía de Segunda B, una plantilla buena, por eso ascendimos. Pero el 20% restante fueron fichajes de extranjeros, cuatro o cinco, y al final acabamos jugando los mismos de siempre. Ninguno de los extranjeros jugaba. Descendimos en la última jornada. Si el equipo que había ascendido se hubiera reforzado un poco mejor, creo que nos habríamos mantenido sobradamente. Pero no se acertó porque los que vinieron no acabaron jugando.

• Tras su paso por el club, ¿sigue en contacto con compañeros o amigos que hizo en Elche?

Sí, aparte de Manel me he encontrado alguna vez con Juanmi, alguna vez con Patxi Iru y con varios más. Con Claudio alguna vez hemos hablado. Todo el mundo recuerda aquella etapa igual, de una manera fantástica.

• ¿Cómo ve al Elche CF actualmente y qué opinión le merece la trayectoria reciente del club?

Es un equipo que juega muy bien, muy equilibrado. Lo que pasa es que, desgraciadamente, muchas veces los resultados no acompañan todo lo que merecen. Primera División es otra historia. Pero juegan muy bien; creo que no van a tener ningún problema y acabarán bien clasificados. Tienen un entrenador con personalidad, y la gente agradece que se juegue al fútbol. Yo los veo perfectamente. Veo muchos equipos por detrás que estarán por debajo de ellos. Hay que dar confianza y tiempo, y ellos lo están demostrando. Supongo que la afición estará contenta.

• Desde su experiencia como jugador, ¿qué cree que distingue al Elche de otros clubes en los que ha estado?

Sobre todo que se vive el fútbol. Tienen un juego alegre, quieren jugar al fútbol. No es como otros equipos donde son más aguerridos. Aquí se intenta jugar bien, y eso es importante para el espectáculo.

• Si pudiera enviar un mensaje a la afición franjiverde, que siempre recuerda a quienes defendieron su camiseta, ¿qué les diría?

Que ya estamos jubilados, pero que el Elche siempre tendrá un trocito en mi corazón. Lo seguimos y nos alegramos de sus éxitos. Este año nos está haciendo disfrutar. Soy un ilicitano más, hasta la muerte.