Llega febrero y, con él, las calles de ciudades de todo el mundo se convierten en el escenario perfecto de un torbellino de colores, risas y música. Diversión e imaginación son dos palabras que definen de la mano la esencia del Carnaval. Una fiesta en la que no faltan los disfraces, el maquillaje y bailes. Todo, bajo un deseo inquebrantable de disfrutar al máximo. Que se lo digan a los ilicitanos. Elche es una de las grandes ciudades que se impregna de ese espíritu festivo que caracteriza el Carnaval.
La Plaza de Baix se ha convertido durante la festividad en un reino de fantasía, con disfraces extravagantes, máscaras enigmáticas y ritmos musicales contagiosos. Un día en el que la creatividad supera las barreras de la realidad, donde puedes ser quién quieras ser. Superhéroes, seres mitológicos, personajes de películas y famosos han visitado la ciudad porque, tal y como comenta, Isabel García, Dama de las Fiestas de Elche, “es un día en el que puedes dar rienda suelta a tu imaginación”.
Vecinos de otras localidades
Ilusión, alegría, creatividad, tradición y originalidad, son palabras con las que muchos vecinos definen el Carnaval de Elche. Augusto Manuel González, vecino de Crevillente, define esta fiesta como su “vida”, al mismo tiempo que no puede esconder la pasión que siente por hacer que sus propios trajes sean “únicos en el mundo”. Su disfraz, “todos menos uno”, está compuesto por 250 botes de cerveza y uno de Coca-Cola. El participante del sorteo ha añadido que con él “tiene el objetivo de divertirse al mismo tiempo en el que ayuda al planeta reciclando”.
Esta celebración no sería lo mismo sin los actos que, año tras año, ofrece el Ayuntamiento de Elche. Ya avisaba Imna Mora, concejala de Festejos, que el evento estaría plagado de actividades dirigidas a toda la familia. Miriam Bernal, responsable del taller de globoflexia, ha destacado que “son actividades muy inclusivas, que están pensadas para todos los públicos”. Por su parte, Manolo Torres, vicepresidente de la Federación Gestora de Festejos Populares, ha recalcado la importancia de iniciativas como esta que “hace que la gente salga a la calle y que hagan piña entre ellos”.
Lamentablemente, algunos talleres e hinchables, previstos para la festividad, han tenido que ser cancelados debido al viento. No obstante, pintacaras, globoflexia, espectáculos, música y un sorteo de disfraces han hecho que la emoción abundara en la plaza. No todos han sido aciertos. También ha habido errores, de los que se deberá aprender para la próxima edición. Centenares de personas han acudido con sus mejores disfraces para llenar de color la ciudad. Los más mayores de la casa también han querido sumarse y acompañar a los más pequeños en una tarde repleta de diversión.
Fiesta familiar
Susana Pérez ha destacado que se trata de una fiesta “en familia” y que “los momentos que pasamos juntos haciendo el disfraz, ya no nos los quita nadie”. Asimismo, Yolanda García, vecina de la ciudad, ha señalado que “llevamos meses trabajando en los disfraces con el objetivo de pasar una buena tarde”. También ha habido aspectos a mejorar. “Falta señalización de las diferentes actividades realizadas en comparación con otros años”, han asegurado a Elche Capital, como todos los ciudadanos que han querido sumarse a nuestro medio.
El Carnaval 2024 ha llegado a su fin y a medida que el color desaparece de las calles, sólo quedan las fotos de ayer y las nuevas ideas que darán formas a los sueños del próximo año. Porque para Elche, la fiesta de Don Carnal, no se trata de un simple día de jolgorio, comparsa, mascarada, regocijo y bullicio. Es un acto ineludible que este año ha conseguido su objetivo, disfrutar todos juntos en un evento repleto de vida, alegría y tradición. Ya queda un día menos para poder disfrutar del Carnaval 2025 en Elche.
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