Según la organización de taxistas, el concejal también manifestó su intención de proporcionar cobertura jurídica y garantías a las multinacionales de VTC para que puedan prestar servicio en el municipio. Los taxistas sospechan de las motivaciones de Guilabert y denuncian lo que consideran un intento de «castigar o sacrificar a las familias que viven del taxi».
En este sentido, la Confederación considera que parece que «haya interés en castigar o sacrificar precisamente a las familias que viven del taxi, que son los que están siempre dando la cara cuando otros transportes no están». Defienden que ofrecen un servicio público esencial «con profesionalidad» y que no piensan solo en «engrosar los balances económicos de una multinacional». Con la coletilla de que no tributan en el país, explica el sindicato en su comunicado.
Exigen reuniones con ellos para solucionar los problemas con el transporte urbano «y no aliándose con presuntos delincuentes que basan su negocio en saltarse las normas». Recuerdan que la Confederación ya cuenta con una sentencia favorable del Supremo que obligó a la Comunitat a sancionar a Cabify por intermediar sin autorización autonómica. Lo mismo dicen de Uber en España en 2014, en este caso con fallo del Tribunal Europeo.
La Confederación de Taxistas afirma que «hay cientos de VTC trabajando para plataformas sin autorización en la Comunidad Valenciana». Los taxistas sostienen que, en lugar de introducir más VTC, se deberían estudiar las deficiencias del transporte público colectivo de Elche y su área metropolitana, y mejorar el servicio complementario que presta el taxi.
En su comunicado, los taxistas piden al concejal que «haga su trabajo con honestidad y no busque atajos, realizando estudios serios de necesidades de movilidad en Elche». Insisten en que es necesario determinar el número adecuado de líneas de transporte colectivo, así como los taxis necesarios para cubrir la demanda y encontrar soluciones efectivas.
La Confederación está dispuesta a colaborar con el Ayuntamiento para debatir estas cuestiones, pero rechaza cualquier intento de legalizar lo que consideran intrusismo en el sector del taxi mediante la incorporación de VTC. Advierten que, si se persigue esa vía, se opondrán «con todas sus fuerzas, sin escatimar medios».
Este conflicto subraya las tensiones entre los taxistas y las plataformas de VTC, un tema recurrente en muchas ciudades españolas. Los taxistas autónomos temen que la entrada de VTC en el mercado local afecte negativamente a su sustento, y piden que se prioricen soluciones que fortalezcan el transporte público y el servicio de taxi existente. La Asociación Radio Taxi Elche ha expresado este viernes su rechazo frontal a la llegada a la ciudad de los operadores de VTC (Uber y Cabify) como pretende y ha anunciado el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Elche.
A través de un comunicado de la Confederación de Taxistas Autónomos de la Comunidad Valenciana, que han remitido los taxistas ilicitanos, la entidad anuncia que va a poner “todos los medios a su alcance” para “proteger a los taxis de Elche” de una medida que tildan de “cacicada”. No descartan recurrir incluso, “si es necesario”, a la justicia de la Unión Europea, y defienden que “la Administración está obligada a estudiar y consensuar con todos los agentes una mejora de la movilidad”.