Acaba el año 2024 y es hora de hacer balance político sobre el gobierno de Elche de PP y VOX.

Para empezar, debemos mencionar que se han liado la manta a la cabeza a la hora de asfaltar lo que debía estar asfaltado hace muchos años. Pero esta actuación que debe ser algo normal para un gobierno municipal no puede enarbolarse como algo extraordinario, porque no lo es.

Luces de Navidad tenemos prácticamente como en Las Vegas, algo que da alegría al ambiente de las calles pero que deja al descubierto otras prioridades que han sido dejadas de lado, ya que se ha gastado más en estas luces que en otras partidas presupuestarias, como la de fumigación del campo de Elche. La religiosidad católica ha impregnado todo lo que rodea al Ayuntamiento de Elche. Un consistorio que es de todos y no todo el mundo es tan católico como los concejales de PP y VOX. Parece que esto al equipo de gobierno le da exactamente igual. Recordemos que el alcalde dijo que lo sería de todos.

El autobús a las pedanías se intuye que va a ser, por fin, una realidad y esperamos que así sea y que dicho servicio termine con una reclamación histórica de los ilicitanos que viven en ellas. Veremos cómo se desarrolla este servicio. Estaremos atentos.

En el otro lado de la balanza tenemos la ausencia total de los grandes proyectos que el PP nos vendió en campaña electoral, un día sí y otro también cuando tanto el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón y el alcalde Pablo Ruz se paseaban por Elche enseñando maquetas y renders a los periodistas sobre: El museo de Arte Contemporáneo en Las Clarisas, La Roda Sur, el tranvía que no será tranvía sino un gran autobús, el nuevo Palacio de Congresos, el Edificio de Riegos el Progreso que sigue apuntalado en la calle siendo ya propiedad del Ayuntamiento de Elche, el mercado central y un largo etcétera, donde también podemos meter la promesa de un nuevo centro de salud en Torrellano que al final no será tal.

En fin, un año que ha sido de terminar obras y proyectos que no eran del PP y VOX sino de la legislatura pasada y que de todo lo que se prometió tan solo hemos visto maquetas y dibujos.

El problema que supone la reconstrucción de la provincia de Valencia después de la DANA, pone negros nubarrones sobre estos proyectos de ciudad tan importantes para nuestro municipio, ya que la Generalitat tiene ahora otras prioridades como es normal. Pero no debemos olvidar que llevamos más de año y medio de legislatura autonómica y municipal y no sabemos nada de todo lo prometido.

Esperamos todos que no pongan como excusa la reconstrucción por la DANA para echar balones fuera. Sería muy lamentable.