Nada hay más evidente que cuando te centras en algún objetivo a largo plazo, te pierdes lo mejor de la vida, que es el momento y las situaciones que vives cada segundo para disfrutar de ella. Podemos ser muy crueles si pensamos que perdimos la oportunidad de ganar por primera vez en la historia en el Sánchez Pizjuán por un fallo garrafal del debutante Héctor Fort, que cualquiera diría “por qué no la sacó al cuarto anfiteatro?!” o vete a saber si se la pidió el compañero o pensó cualquier otra cosa, pero queda evidente lo que veníamos diciendo hace varias semanas. Corres muchos riesgos en salida de balón, y en esta categoría nadie te perdona, tal como hizo el Betis en su día o el Atlético de Madrid en su caso. Pero hoy, dado como se desarrollaba el partido y el minuto que era, podíamos pensar que todo balón que llegara a las inmediaciones del área del Elche había que reventarlo y más de espaldas a mis rivales. Más si el que recibe el “regalo” es Alexis Sánchez que con un taconazo le deja al compañero Peque y la clava en el ángulo con mucha calidad.
Pero a lo que me refiero y es lo que debemos disfrutar, son distintas sensaciones a lo largo de los partidos que viene disputando el equipo en la máxima categoría. Es obvio que si ganabas hoy y sin jugar los demás equipos te ponías en un ilusionante tercer puesto sólo por detrás de Real Madrid y Ath. Bilbao con 8 puntos de 12 posibles (me recuerda a los amigos venezolanos que compraban billetes de avión para el próximo Mundial cuando iban ganando 2-1 frente a la potente Colombia en el último partido de clasificación de la CONMEBOL, para acabar perdiendo 3-6 ). Igual pensaría algún aficionado ilicitano en los puestos de Champions League en la jornada 4. Todo eso es desviar la atención de lo verdaderamente importante.
Por ejemplo, ver que hay ciertas bajas y los que les suplen, cumplen sobradamente. Si echábamos en falta a Mendoza hoy o a Aguado, el debutante en el once Neto cumplió más que sobradamente, siendo posiblemente el jugador más determinante del partido. Corrigiendo pequeños detalles, como el primer gol que sale Bigas pensando que puede anticipar, pero el balón con mala suerte y algún rebote, acaba en el espacio que dejó Bigas, aunque intentaron cerrar bien tanto Chust como Pedrosa tras el salto de Affengruber o algo más de ambición en André da Silva en el min. 15 cuando dudó en ir como un puñal al primer palo en conducción y la defensa sevillana fue mucho más contundente para impedir su avance; o la primera jugada del segundo tiempo que regalamos la posesión y marcan gol, menos mal que anulado por fuera de juego. Teniendo claro las pequeñas cosas que se pueden mejorar, se puede llegar a competir con cualquier equipo de la máxima categoría española.
Aspectos muy positivos: cómo llega a presionar Rafa Mir en el min. 63 de partido al central y cuando abre a banda a su lateral que sube la banda y le roba el balón con un hermoso tackle para luego darle continuidad a la jugada con André da Silva (como quiere que se le llame a partir de ahora) para luego echarse el equipo a la espalda con el libre directo que ponía por delante al Elche ante todo un Sevilla, muy intenso y agresivo en todas las facetas defensivas (la entrada en el min. 3 a Ali Houary es para analizar) te motiva para ilusionarte en que pueden hacer grandes cosas.
Si ves los 3 centrales que tienes, que son expeditivos y le están cogiendo el aire a la categoría. Si ves a Aleix Febas cómo se deja todo en defensa, en venir a recibir, en batir líneas de presión con sus conducciones y encima al inicio del segundo tiempo ves que empiezan a calentar Álvaro Rodríguez, Josan, Héctor Fort, Rodrigo Mendoza, etc pues piensas que cualquiera que entre al campo va a seguir sumando y eso dice mucho del equipo que se ha formado esta temporada.
Y cuando decía el año pasado, insistiendo yo mucho en la aparición del delantero siempre al primer palo y que tanto carecían la temporada pasada, sólo viendo cómo en el gol del empate a 1 Rafa Mir estaba donde debe estar siempre un delantero arrastrando a 2 centrales y un tercero vigilando muy de cerca, si se une la gran jugada de Neto por banda tras el globo de Aleix Febas que le hace encarar un 1v1 con un pase de la muerte atrás, todo eso junto hace que André da Silva esté totalmente sólo en el punto de penalty y empuje el balón a portería vacía. Esas cosas son las que hay que disfrutar, siendo conscientes que no podemos relajarnos ni siquiera el lunes leyendo el periódico en casa.
Resumiendo, concentración máxima en el día a día, cabeza puesta en el próximo entrenamiento para ganarle al Oviedo con todas las de la ley en el próximo encuentro y día a día nos iremos dando cuenta hasta dónde es capaz de llegar este equipo, si el objetivo a largo plazo no está tan lejos, eso lo irá marcando jornada a jornada los aciertos, tanto en ataque como en defensa.