El Elche Club de Fútbol se prepara para enfrentar al Club Deportivo Castellón este sábado a las 18:30 horas en el estadio Martínez Valero. Este encuentro marca el regreso del equipo albinegro a este escenario después de 15 años, siendo su última visita en 2010, cuando el Elche se impuso por 2-0 con goles de Jorge Molina y David Generelo.
El conjunto dirigido por Eder Sarabia busca alcanzar su octava victoria consecutiva en casa, consolidando una racha positiva que mantiene desde noviembre. A pesar de la reciente derrota ante el Racing de Santander (2-0), que representa apenas la segunda en los últimos cuatro meses, el equipo mantiene una actitud positiva y enfocada en sus objetivos. Sarabia ha reconocido la falta de acierto en el área rival y ha enfatizado la necesidad de mantener la confianza y la ilusión generadas a lo largo de la temporada.
Sarabia ha destacado la importancia de no subestimar a ningún rival y ha señalado que, aunque se espera que el Elche gane en todos los campos, la realidad de la competición demuestra que cualquier equipo puede sorprender. El técnico ha subrayado la necesidad de ser conscientes de esta situación y de mantener la concentración en cada encuentro.
El entrenador también ha reflexionado sobre la percepción de que el Elche debe ganar en todos los campos y arrasar, señalando que esta expectativa es resultado de la confianza e ilusión que el equipo ha generado, pero advirtiendo que cualquier rival puede ganar y que es importante ser conscientes de ello.
Bajas
En cuanto a las bajas, el Elche no podrá contar con Rashani, Nico Fernández Mercau y Yago de Santiago, todos lesionados. A pesar de estas ausencias, el equipo confía en mantener su buen rendimiento en casa y seguir sumando puntos en su camino hacia los objetivos de la temporada.
El encuentro promete ser atractivo, con dos equipos que buscan dominar el juego y mantener la posesión del balón. El Elche intentará aprovechar su fortaleza como local para imponerse a un Castellón que llega con confianza, pero consciente de las dificultades que representa enfrentar a un equipo sólido en su estadio.