La Policía Nacional ha detenido en Elche a dos personas por contratar a trabajadores en situación irregular, incumpliendo la normativa laboral y aprovechándose de su vulnerabilidad. Las investigaciones, llevadas a cabo en colaboración con la Inspección de Trabajo y la Policía Adscrita a la Comunidad Valenciana, permitieron descubrir que los empleados trabajaban sin contrato y en condiciones precarias.

La primera detención tuvo lugar en Elche tras un control de tráfico de las Unidades de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional. Durante la inspección de un vehículo, los agentes identificaron a sus ocupantes: el conductor y su acompañante. Al realizar las primeras comprobaciones, descubrieron que el copiloto, un varón extranjero en situación irregular, trabajaba sin contrato para el conductor, quien resultó ser el gerente de una empresa de calzado.

Las pesquisas fueron asumidas por la Unidad de Extranjería de la Policía Nacional, que confirmó que el trabajador irregular había ingresado a España de manera clandestina un año antes y llevaba siete meses desempeñando tareas de mantenimiento y jardinería en una nave propiedad del empresario. Sus condiciones laborales eran extremadamente precarias, ya que trabajaba tres días a la semana con jornadas de seis horas y percibía únicamente cinco euros por hora.

El empresario, un español de 51 años, tenía conocimiento de la situación administrativa de su empleado y presuntamente se aprovechó de ello para beneficiarse económicamente. Tras ser arrestado en Elche, se puso el caso en conocimiento del Juzgado de Instrucción de Guardia de la localidad.

El segundo caso se produjo en Torrevieja, donde la Policía Adscrita a la Comunidad Valenciana y la Inspección de Trabajo realizaron una inspección en una peluquería. Durante la intervención, se detectaron dos trabajadores en situación irregular que prestaban servicios sin contrato. La Unidad de Extranjería de la Policía Nacional confirmó que los empleados carecían de un vínculo laboral formal con el establecimiento y logró identificar al propietario del negocio.

El responsable, un ciudadano marroquí de 51 años con antecedentes policiales, fue detenido en Elche y su caso fue remitido al Juzgado de Instrucción de Guardia.

La Policía Nacional recuerda que el empleo irregular no solo perjudica a los trabajadores, sino que también afecta al conjunto de la sociedad, ya que quienes trabajan sin contrato carecen de derechos básicos como seguridad social, cobertura médica o prestaciones por desempleo. Además, la contratación de empleados en situación irregular supone un delito que puede conllevar sanciones económicas y penales.

Para evitar estos abusos, las autoridades instan a los ciudadanos a denunciar cualquier irregularidad laboral a la Inspección de Trabajo o a la Policía Nacional, que dispone de mecanismos de denuncia anónima y confidencial.