El Ayuntamiento Pleno el pasado 29 de enero de 2024, se decidieron adoptar una serie de acuerdos que consolidan y refuerzan la salvaguarda de este histórico problema urbanístico de la ciudad. El primer paso de esta importante resolución fue el desistimiento de la tramitación de la Modificación Puntual número 36 de la ordenación estructural del Plan General, la cual contemplaba un cambio en la calificación de las parcelas de l’Escorxador, el Mercado Central y el Mercado Provisional. Este desistimiento fue remitido al Servicio Territorial de Urbanismo con el fin de proceder al archivo del expediente, permitiendo así continuar con la modificación puntual enfocada específicamente en la protección del Mercado Central. El segundo acuerdo adoptado fue la aprobación de la Modificación Puntual número 36, la cual se inició como una propuesta municipal. Esta medida representa un paso crucial hacia la rehabilitación de algo que para muchos no es preservación y valorización del patrimonio arquitectónico y cultural de un edificio, sino terminar con el desastre que encarna la situación del Mercado Central de Elche.
Como parte de este proceso, se remitió una copia digital del documento refundido del plan a la conselleria competente en materia de ordenación del territorio y urbanismo, para su inscripción en el Registro Autonómico de Instrumentos de Planeamiento Urbanístico. Con el número de inscripción 03065-1106, fechado el 11 de marzo de 2024, con el que se oficializa la inclusión de estas disposiciones en el marco normativo correspondiente.Además, en un esfuerzo por garantizar la máxima difusión y transparencia, se acordó la publicación del presente acuerdo junto con las normas urbanísticas y la ficha del Catálogo en el Boletín Oficial de la Provincia de Alicante. Asimismo, se procederá a la inserción de la documentación aprobada en la página web municipal, facilitando así el acceso a información relevante para la ciudadanía.
En cuanto a la normativa urbanística específica relacionada con las condiciones de edificación del edificio del Mercado Central, se establecen una serie de disposiciones que buscan preservar su integridad arquitectónica y su valor histórico. Se destacan aspectos como la protección parcial del volumen, las alineaciones, la altura, la cubierta y las fachadas, entre otros. En particular, se hace especial hincapié en la conservación y puesta en valor de los restos arqueológicos de los baños árabes existentes en la Plaza de la Fruta. Se establece que se recortará la primera crujía del edificio con fachada a esta plaza para potenciar la protección y visualización de dichos restos, manteniendo íntegramente el volumen resultante.
En resumen, la protección oficial del Mercado Central de Elche marca un importante paso adelante en el compromiso del Ayuntamiento y la comunidad local con la preservación de su patrimonio histórico y cultural. Esta medida no solo garantiza la conservación del más que cuestionable legado arquitectónico de la ciudad, sino que también permite que Pimesa pueda licitar el proyecto de este muerto que se ha visto obligado a asumir el nuevo gobierno municipal.