El president de la Generalitat, Carlos Mazón, ha destacado hoy la importancia de la finalización de la Ronda Sur de Elche, afirmando que “garantiza la vertebración del entorno metropolitano, mejora la movilidad y favorece el desarrollo económico.” Mazón ha firmado junto al alcalde de Elche, Pablo Ruz, el convenio para la ejecución de esta obra largamente esperada, que contará con un presupuesto de 43.675.000 euros, de los cuales 35.875.000 euros serán aportados por la Generalitat y 7.800.000 euros por el Ayuntamiento de Elche.

En el acto también estuvieron presentes la consellera de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio, Salomé Pradas; la vicepresidenta segunda y consellera de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda, Susana Camarero; y la consellera de Hacienda y Economía, Ruth Merino.

Carlos Mazón subrayó la rapidez con la que se ha puesto en marcha el proyecto, resaltando que “en tiempo récord, tan solo 5 semanas, han sido suficientes para poner en marcha un proyecto que beneficiará a más de 200.000 ilicitanos y que llevaba paralizado ocho años.” Además, destacó que esta actuación “contribuirá a la mejora de la seguridad vial y de la accesibilidad al casco urbano y a los equipamientos públicos cercanos.”

Para el president, la firma de este convenio es “un hito” que representa “un paso significativo hacia un futuro más próspero y conectado para nuestra comunidad, permitiendo una descongestión del tráfico en la zona sur y oeste del casco urbano, mejorando la calidad de vida de los ciudadanos.”

Mazón enfatizó que “los ilicitanos tienen derecho a las mismas grandes comunicaciones que tienen las grandes ciudades,” y afirmó que “venimos, no solamente a saldar una deuda histórica, sino a darle a Elche las potencialidades y el desarrollo que se merece.”

Con este convenio, se inician oficialmente los trámites para que la ronda sea una realidad, con la expectativa de que las obras puedan licitarse y comenzar a lo largo de este año. Además, Mazón mencionó que, junto con esta inversión, la futura llegada del TRAM reafirma la apuesta del Consell por la ciudad de Elche y su infraestructura.

El tramo entre la carretera CV-851 y la N-340 es el último pendiente para cerrar completamente la ronda exterior a Elche, ofreciendo así una alternativa al tráfico metropolitano y evitando la necesidad de circular por el centro urbano.