CSIF lamenta la situación y destaca que no ha quedado otra opción que mantener el calendario de movilizaciones. Los paros se llevarán a cabo de una hora por la mañana, de 8:30 a 9:30, y otra hora por la tarde, de 18:00 a 19:00.

Entre las reivindicaciones de los trabajadores se incluye un compromiso por escrito de la empresa para respetar y mantener todos los acuerdos previos. Esto se considera esencial para garantizar la estabilidad y el cumplimiento de las condiciones laborales que ya se habían pactado con la anterior concesionaria.

Otra demanda importante es el abono de la radioscopia fija completa a toda la plantilla. Los trabajadores insisten en que esta compensación debe ser uniforme y justa para todos, sin excepciones, para reconocer la labor especializada que realizan en la seguridad aeroportuaria.

El pago del complemento de parking a todos los trabajadores y la revisión de su cuantía es otra reivindicación clave. Este beneficio es fundamental para quienes deben desplazarse diariamente al aeropuerto y actualmente sienten que no se les compensa adecuadamente por este gasto adicional.

La eliminación del turno de las 3:30 am y una reducción drástica de los turnos matutinos también son exigencias prioritarias. Los trabajadores argumentan que estos horarios extremos afectan gravemente su salud y bienestar, y buscan horarios más razonables que permitan un mejor equilibrio entre la vida laboral y personal.

El cumplimiento estricto de la legislación vigente en materia de descansos entre jornadas es una preocupación constante. Los vigilantes exigen que se respeten sus derechos a descansos adecuados para garantizar su salud y capacidad de desempeñar sus funciones de manera eficiente.

Además, piden el establecimiento de turnos de comida en horas razonables y descansos adicionales en el filtro de pasajeros. Estas medidas son vitales para que los trabajadores puedan mantener su energía y concentración durante sus turnos.

La adecuación de las instalaciones para el personal operativo es otra demanda importante. Los vigilantes necesitan espacios adecuados y bien equipados para realizar su trabajo de manera eficiente y segura.

También se solicita el establecimiento de un retén remunerado y el respeto a la desconexión digital. Estas medidas buscan asegurar que los trabajadores no sean llamados fuera de su horario laboral sin la debida compensación y que puedan desconectar de sus responsabilidades laborales durante su tiempo libre.

CSIF lamenta que, a pesar de que estas son las mismas reivindicaciones de otros aeropuertos, los sindicatos firmantes del convenio colectivo de empresas de seguridad privada no las lleven a la mesa negociadora nacional, donde CSIF aún no tiene representación.

La huelga se mantiene como medida de presión para alcanzar un acuerdo que satisfaga las demandas de los vigilantes y mejore sus condiciones laborales en el Aeropuerto Alicante-Elche.