La Brigada de Policía Judicial en Elche dirigió la investigación con el objetivo de desmantelar un grupo dedicado a delitos graves, incluyendo detenciones ilegales, tráfico de drogas, tenencia ilícita de armas y extorsiones. Los líderes del grupo ofrecían droga a toxicómanos locales a cambio de usar sus viviendas para la distribución de sustancias. Las víctimas, endeudadas por el consumo, eran forzadas a participar en la venta de drogas y sometidas a amenazas y violencia para garantizar su colaboración.
Las zonas más afectadas fueron Carrús, Toscar y la “Puñalá”, donde se encontraban los inmuebles conocidos como “fumaderos”, utilizados tanto para la venta como para el consumo de drogas.
En la fase de explotación del operativo, se han neutralizado cuatro puntos de venta y consumo de drogas de alta actividad. Además de las detenciones, se ha intervenido un arsenal que incluye un arma corta con silenciador, una carabina, diversas armas blancas, munición, 16.000 euros en efectivo, 250 gramos de cocaína y 4,5 kilogramos de marihuana.
La operación también contó con la colaboración de otras unidades de la Policía Nacional, incluyendo Guías Caninos, Medios Aéreos y las Unidades de Prevención y Reacción, reforzando la efectividad del operativo.