La ceremonia, que simboliza la Asunción de María, se celebra cada año al término de las funciones del 14 y 15 de agosto, siguiendo un esquema escénico y musical que se ha mantenido inalterable durante siglos.
En la escena final, la imagen de la Virgen ha sido elevada en la mangrana, uno de los elementos aéreos característicos de la representación, y posteriormente coronada desde el Araceli por un ángel, siguiendo el ritual establecido en el libreto medieval que se conserva íntegro en valenciano antiguo. Este momento, acompañado por la música y los cantos propios de la obra, ha marcado el cierre de la función con la basílica llena de público.
El Misteri d’Elx, cuyo origen documentado se remonta al siglo XV, es la única obra de teatro sacro-lírica de estas características que se interpreta de forma ininterrumpida hasta la actualidad. Declarado Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO en 2001, combina texto, canto, efectos escénicos y participación popular, y constituye uno de los principales referentes culturales y religiosos de la ciudad.
Con la Coronación concluye la Festa de 2025, que una vez más ha reunido a miles de personas en torno a Santa María, manteniendo viva una tradición que forma parte esencial de la identidad ilicitana.