Elche ha vivido este viernes una jornada muy especial. Con motivo de la nueva ruta aérea que conecta el aeropuerto Alicante-Elche Miguel Hernández con Chisináu, la capital de Moldavia, Visitelche ha diseñado una visita para que medios de comunicación y turoperadores moldavos descubran los encantos de la ciudad. Y no han faltado ni el Palmeral, ni los sabores típicos de la terreta.
La nueva conexión, que estará activa durante toda la temporada de verano con dos vuelos semanales gracias a la aerolínea Sky Up Airlines, es una oportunidad para abrir Elche a nuevos viajeros del este de Europa. Por eso, desde el Patronato de Turismo de la Costa Blanca y Visitelche se ha apostado por mostrar lo mejor de nuestra ciudad: historia, cultura y buena mesa.
Durante la jornada, los invitados moldavos han recorrido algunos de los lugares más simbólicos del municipio y han podido disfrutar de una degustación gastronómica protagonizada por productos locales. Una forma sabrosa de presentarles lo que Elche puede ofrecer más allá del sol y la playa.
Además, Visitelche ha participado con estos profesionales en un encuentro B2B con empresas turísticas ilicitanas, en un evento organizado junto a HOSBEC y APHA, con el objetivo de crear lazos comerciales y abrir camino a futuras colaboraciones turísticas.
Esta nueva ruta con Moldavia se suma a otras recientes como las que conectan Alicante con Linz, Salzburgo o Bydgoszcz, lo que demuestra que la Costa Blanca sigue ganando peso en Europa como destino turístico. En total, el aeropuerto ya suma 223 rutas operativas para este verano.
Así, Elche continúa trabajando por posicionarse como un destino diverso, atractivo y bien conectado. Y, con acciones como esta, demuestra que sabe cómo conquistar a quien nos visita: con hospitalidad, historia y un buen plato de arroz con costra sobre la mesa.