No todo lo que reluce es oro, ni mucho menos. También el running tiene cosas menos buenas y no hay que ponerse una venda en los ojos. Tampoco quiero sentar cátedra, ni pecar de pedante, pero esta frase y realidad existen y se palpamucho en el ambiente deportivo runner. Se habla, lo cual no quiere decir que se entienda, mucho de ‘carbono’ y de ‘zapatillas mágicas’ que, parece ser, corren casi solas y ni hace falta entrenar para ganarle segundos como si nada a cada kilómetro. También se habla de esos ‘geles supersónicos vitamínicos’ como si tal cosa, pero pocos se informan de su composición y de por qué tomarlos ‘ayuda mucho’ y punto.
Saber quién fue Filípides, aunque no nos vaya a hacer correr más ni mejor, es algo esencial para entender un poquito nuestro deporte y esa palabra, distancia y hazaña mágica llamada maratón. No tiene por qué saberlo todo el mundo que se pone tras la línea de salida, pero sí que estaría bien un poquito de historia, documentación y cultura general sobre nuestro deporte, para que, más allá de hacer la típica pregunta de “¿y tú corres maratones?”, ahondar más en conceptos básicos que nos pueden ayudar mucho a comprender este maravilloso deporte (por cierto, una recomendación fácil y accesible para empaparnos bien es leer la revista, sí en papel, ‘Soy corredor’).
Expongo un claro símil. Una pista de atletismo, por ejemplo, la nuestra tan querida del Estadio Manolo Jaén, inaugurada en 1996, mide 400 metros exactos, ni un metro más ni un metro menos. Da igual, repito, da igual, lo que nos marque nuestro súper hiper mega guapo reloj GPS. Del stravismo, koms, kudos, segmentos, récords… también podríamos escribir más de dos libros, añadamos los «súper entrenadores» que hay en las bonitas redes sociales que se dedican a investigar y a criticar desde lo que hace Eliud Kipchoge hasta su vecino ironman del quinto piso. No quiero ganarme muchos enemigos en este mi deporte que tanto quiero y respeto, pero en el que últimamente parece que todo vale, y ya tuvimos un gran boom del 2014 al 2017 y que espero no se repita porque luego vinieron unos años delicados.
La información buena y el conocimiento exhaustivo de la materia que uno trata/practica puede ayudar a que seamos mejores. Para terminar, toca explicar quien fue Filípides. Según la leyenda, en el año 490 A.C. un soldado griego de nombre Filípides corrió desde la ciudad de Maratón a Atenas para anunciar que los griegos habían vencido a los persas en la batalla de Maratón. Filípides cayó muerto extenuado por tanto esfuerzo. Aunque la versión popular más extendida ha querido asociar el deceso de Filípides al hecho de haber corrido esa larga distancia cercana a los 40 kilómetros, se va imponiendo la tesis de que en realidad su muerte fue provocada por heridas previas de la batalla, ya que Filípides, como mensajero que era, estaba acostumbrado a correr distancias mucho más largas.
