Para los que hemos tenido la oportunidad de conocerlo, podemos estar muy satisfechos con D. Pedro, no dejabas de aprender de todo lo que sabía, que era muchísimo, tenía el don de la sabiduría, tenía el espíritu del calzado que le corría por sus venas, fue uno de los referentes de nuestra industria en Elche.

Todo aquel que le conocía hablaba con admiración de él, buen conversador, buen padre, buen abuelo, gran esposo y gran amigo de sus amigos.

Nunca rehuía un saludo, por prisa que llevase , hizo de su nombre un referente mundial, de buena marca. Del zapato lo sabía todo, pero de sus empleados también, siempre se preocupó por sus trabajadores, solía decir que para hacer el mejor zapato tenías que tener a los mejores, y ellos tenían que sentir que su empresa les valoraba.

Siempre elegante en todo, en sus formas, en el vestir, porque a presumido tampoco le ganaba nadie, a D. Pedro era imposible verlo sin que fuera de manera impecable.

Por desgracia se ha marchado una de las personas que hicieron grande a Elche y que contribuyó a que nuestro pueblo fuese conocido en todo el mundo como referente del calzado.

Echaremos mucho de menos no volver a verlo los domingos en la iglesia de Valverde, donde siempre llegaba acompañado de Marina y siempre con un buen coche, que era otra de sus pasiones. Se hará difícil el no verlos juntos en Batiste, donde tanto les gustaba ir, será difícil pasar por Sor Josefa Alcorta y que D.Pedro no esté, aunque los que siempre le recordaremos sabemos que esa siempre será su calle y que Elche, siempre será su pueblo.

Don Pedro, tu amistad y tu elegancia, siempre serán un referente.