Las urgencias del Hospital Vinalopó de Elche han registrado un récord en el número de pacientes atendidos durante el mes de julio, según informó el Dr. Julio Armas Castro, médico de Urgencias de este centro sanitario. En una entrevista exclusiva, el Dr. Armas detalló las causas de este incremento y las dificultades que enfrenta el personal médico en la atención a los pacientes.
Las razones detrás del aumento
El Dr. Armas atribuyó el incremento de visitas a urgencias a una serie de factores típicos del verano. Entre ellos, destacó la reducción en la capacidad de atención primaria debido a la escasez de médicos durante la temporada estival. «La disminución de la posibilidad de primera cita en la atención primaria y el cierre de los centros de salud por las tardes genera que los pacientes acudan a urgencias como su primera opción,» explicó.
Además, la llegada masiva de turistas a la zona por su atractivo costero también ha contribuido al aumento en la afluencia. «En lugares como el nuestro, donde hay un desplazamiento significativo de pacientes hacia las playas, el volumen de urgencias se incrementa considerablemente,» añadió.
Cambios en la afluencia y patologías comunes
El doctor también subrayó que el flujo de pacientes no es constante a lo largo del día, sino que se intensifica en determinadas horas, especialmente después de las 6:30 de la tarde y hasta medianoche. Durante estos períodos, el número de pacientes puede duplicarse, creando picos de demanda que dificultan la atención rápida y eficiente.
En cuanto a las patologías más comunes en esta época del año, mencionó un aumento en los casos de traumatismos debido a caídas, especialmente en playas y piscinas, así como intoxicaciones etílicas durante los fines de semana. «Las infecciones respiratorias causadas por cambios bruscos de temperatura, como el aire acondicionado, y las infecciones de orina también son frecuentes,» comentó.
El desafío de la atención médica en verano
La llegada del verano no solo trae más pacientes, sino que también reduce la plantilla de personal médico disponible, ya que muchos profesionales toman vacaciones sin ser reemplazados. Esto, según el Dr. Armas, genera «una cobertura mínima en determinadas circunstancias» que provoca un aumento en los tiempos de espera para ser atendido en urgencias. «Los pacientes pueden esperar entre tres y siete horas para una primera visita,» dijo, añadiendo que la demora también se debe a que las citas en atención primaria pueden llegar a estar programadas para dentro de tres o cuatro semanas.
Un sistema de triaje bajo presión
El protocolo de triaje, diseñado para priorizar a los pacientes según la gravedad de sus síntomas, se ve constantemente puesto a prueba en estos momentos de alta demanda. «El sistema de triaje permite la organización del trabajo, pero no es infalible,» señaló el Dr. Armas. Durante los picos de afluencia, los pacientes con patologías menos graves, triados en amarillo o verde, pueden esperar hasta siete horas para ser atendidos, lo que desborda la capacidad del servicio.
Mirando al futuro
El aumento récord de pacientes en las urgencias del Hospital Vinalopó pone de manifiesto la necesidad de reforzar los servicios de atención primaria y de urgencias durante el verano. La situación actual, exacerbada por las limitaciones estacionales, plantea un desafío significativo para el personal médico y afecta directamente a la calidad de la atención que reciben los pacientes.
El Dr. Armas concluyó su intervención haciendo un llamado a la reflexión sobre la planificación de recursos en el sistema de salud, especialmente en períodos de alta demanda como el verano. «Es fundamental que se busquen soluciones para evitar que las urgencias se conviertan en la primera opción de atención para patologías que podrían resolverse en otros niveles asistenciales,» afirmó.
Este récord de afluencia en urgencias durante el mes de julio en el Hospital Vinalopó es un claro indicador de la presión a la que está sometido el sistema de salud en esta época del año, y pone en relieve la importancia de una planificación adecuada para evitar la saturación de los servicios.