El barrio de Carrús, situado al norte de la Avenida de la Libertad y al oeste del río Vinalopó en la ciudad de Elche, ha sido durante mucho tiempo conocido por su escasez de dotaciones públicas. Derivando su nombre de la Partida Rural de Carrús, este vecindario ha enfrentado desafíos significativos, en gran parte debido a su rápido crecimiento impulsado por la inmigración, en particular en las décadas de 1950 y 1990-2010.
La falta de inversiones y servicios públicos adecuados, ha sido una preocupación constante para los residentes de Carrús, y han obligado al nuevo gobierno local a tomar medidas para abordar las carencias. En este contexto, las falsas y estúpidas noticias aparecidas como el barrio mas “ pobre” de España, publicitándolo como modelo de la marginalidad, por gente que jamas han pisado Carrús y no conocen al barrio más importante y poblado de Elche con más de 80.000 habitantes (incluyendo también El Toscar). Han convertido en imprescindible un plan urgente de actuaciones para mejorar las infraestructuras y servicios disponibles para los habitantes de Carrús.
El proyecto de Jayton, tiene como plan de actuación, la renovación de la manzana de Jayton. Supone mucho más que la mera construcción de un edificio cultural. La idea de una nueva plaza rejuvenecida con calles renovadas y espacios verdes, pretende crear un oasis de tranquilidad en medio del bullicio urbano, sumando un total de aproximadamente 4,400 metros cuadrados de áreas para el disfrute de la comunidad. El plan no solo es la construcción de un auditorio, sino que también abarca la construcción de oficinas municipales, con aparcamiento gratuito, plazas gratuitas y vigiladas para 160 vehículos.
El propósito de esta iniciativa era proporcionar un lugar versátil que pudiera albergar una variedad de eventos culturales, conferencias y actividades comunitarias, al mismo tiempo que se utiliza eficientemente el espacio para las necesidades administrativas del municipio.
Pero la renovación se encuentra en un impasse inesperado de al menos dos meses y medio, posponiendo el inicio de las obras hasta 2025 a causa de un recurso presentado ante el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales. La razón detrás de esta pausa radica en la impugnación por parte de una empresa descalificada, que arguye que la información presentada en el sobre no estaba conforme con las normativas establecidas. Ante esta controversia, el tribunal ha dictaminado la necesidad de reiniciar por completo el proceso de licitación. A pesar de este contratiempo, se mantiene la esperanza de que la adjudicación pueda tener lugar en torno al mes de junio, aunque en un principio se contemplaba el inicio de las obras para los meses de noviembre o diciembre. Este revés ha generado incertidumbre y preocupación entre los vecinos y los partidos políticos y plantea nuevos desafíos en su ejecución.
Esta situación, ha abierto el debate político. Sus divergentes posturas han generado un conflicto político en cuanto a su modelo y ejecución. Frente al posicionamiento del gobierno ilicitano, el PSOE ha planteado dudas y críticas sobre el plan del PP. La oposición, sugiere una revisión del proyecto, proponiendo la construcción de un aparcamiento subterráneo más adaptado a las necesidades de estacionamiento de la zona. Curioso que en ocho años no ejecutaran nada de lo que reclaman.
Comercio local
El vecindario tiene clara su postura, muchos de los trabajadores de la zona han destacado la importancia de modernizar los servicios para mantener el atractivo del vecindario para el comercio local, destacando el proyecto para la creación del auditorio en Jayton. Los comerciantes señalan que la zona de Carrús es un lugar muy recorrido por los vecinos de Elche tanto como por visitantes procedentes de otras ciudades. Estos declaran que el proyecto auditorio no solo transformará la apariencia física de Elche, sino que también tendrá cierto impacto en la vida de los ilicitanos. La creación de nuevos espacios culturales y administrativos fortalecerá el tejido social de la ciudad, fomentando el sentido de pertenencia y la participación cívica. Además, la implementación de un sistema de aparcamiento gratuito aliviará la presión sobre el tráfico y mejorará la calidad de vida de los habitantes locales.
Por otro lado, la propuesta de la oposición, de la creación de un aparcamiento subterráneo en la zona, ha causado cierta controversia entre los vecinos. Pese a estar de acuerdo sobre la falta de aparcamientos, que supone un problema especialmente los fines de semana y días de mercado, muchos apuestan por la idea de rejuvenecer de forma cultural la comunidad y darle cierto atractivo social. Asimismo, muchos de los comerciantes se han opuesto a la iniciativa del Partido Socialista debido a la existencia de otros aparcamientos privados y de pago cercanos que generan debate. Por otro lado, los comerciantes también han querido hacer hincapié en la importancia de los árboles centenarios que se encuentran en el solar, abogando por la ejecución del proyecto sin dañarlos.
A pesar de los desafíos y desacuerdos, el proyecto Jayton sigue siendo un faro de esperanza para el vecindario ilicitano, que más allá de solucionar la falta de espacios de estacionamiento que muchos de los vecinos han reclamado, buscan representar un compromiso con la innovación, sostenibilidad y mejora de la calidad de vida. Carrús, necesita inversiones ya. Carrús, no necesita más demoras.