Elche, nuestra querida ciudad, está experimentando un renacimiento que muchos han esperado durante mucho tiempo. Finalmente, está donde siempre debió estar: en el centro de la atención, en el corazón de la actividad cultural, política y social de la Comunidad Valenciana.
Es evidente el cambio en el ambiente de Elche. Ya no es una ciudad deprimida, sino que rebosa vida y energía. Basta con dar un paseo por sus calles para encontrarse con una amplia variedad de actividades: desde conciertos y exposiciones hasta clases de gimnasia al aire libre y representaciones teatrales. Esta vitalidad es un reflejo del espíritu renovado que ha tomado la ciudad.
En el ámbito político, Elche está recibiendo la atención que merece. La visita regular de altos cargos de la Generalitat Valenciana demuestra el reconocimiento de la importancia de nuestra ciudad. Con representantes ilicitanos en todas las esferas del gobierno, se reafirma el papel destacado que desempeña Elche a nivel provincial, autonómico, nacional y europeo.
Es alentador ver cómo Elche y Alicante han dejado atrás sus diferencias y han unido fuerzas para promover el bienestar mutuo. La colaboración entre ambas ciudades es un paso adelante hacia un futuro próspero para toda la provincia.
Aprovecho este espacio para felicitar al Hércules por su reciente ascenso y expresar mi deseo de que pronto celebremos el ascenso de nuestro Elche a primera división. Porque Elche siempre ha sido y siempre será una ciudad de primera.
Sigamos apoyando a nuestra ciudad, participando en sus eventos y demostrando al mundo que Elche está más viva y lista para brillar que nunca antes.